La materia prima comenzó a dañarse desde hace mucho tiermpo

El mentir es una falta de respeto.

Por: Dalíbar Gómez

Me gustaría compartir una experiencia que viví hace unos cuantos días, pero antes de empezar quiero hacerle una salvedad, sé que mis artículos podrían afectar o molestar directa o indirectamente de manera particular a alguien, y con todo el respeto le pido disculpas, pues no es ni será jamás mi intención.

Sé que hay una gran mayoría de personas que verán mis comentarios de manera positiva, y encaminados por el bien de la comunidad; hago el comentario porque de manera sorpresiva he recibido comentarios muy favorables a que yo siga colaborando con mi pueblo de esta manera.

Bueno, retomando el tema de hoy: LA MATERIA PRIMA COMENZO A DAÑARSE DESDE HACE MUCHO, SOLO, QUE AUN ESTAMOS A TIEMPO.

Les comenzare recordando en los tiempos aquellos donde en Cabral se jugaba volleyball y basket en la cancha del barrio El Llano; no los puedo mencionar a todos, pero entre otros estaban LORENCITO, FELIPITO, SOPA, ROBERTO, OMAR, KAY, PACHECO, CALMAGUERRA, un servidor, etc. eran tiempos donde todo era color de rosa, pero había un problema: Vale mencionar que al llegar a Cánada, mi materia prima (yo), estaba ya deformada.

En Cabral, nos pasábamos horas y horas discutiendo una jugada. Se paraba el juego porque nadie daba su brazo a torcer, aun sabiendo que alguno de los dos equipos tenía razón. No había vuelta floja. Nadie quería perder,aun discutiendo sin razón había que transarse; alguien hizo una falta, pero no lo admite; porque el equipo está perdiendo en el marcador, y en ese momento, se paraba el juego.

Si era en volleyball, toque la pelota en el bloqueo, y aunque me llevaran al paredón decía que no la toque, porque no quería que la bola pase al bando contrario. Por otro lado, libre Dios que un jugador cometa un error en el equipo, ya que el resto de los compañeros lo miraban como si se lo querían comer... y así era el juego.

El árbitro era más parcial que imparcial. No había respeto, ni por tu compañero de juego ni por el adversario.

Pues bien, al llegar aquí a Canadá yo pensaba que era lo mismo, pues fíjense que para sorpresa mía, no era así. Recuerdo mi primera y última experiencia fue una vez que toque la maya de volleyball en un partido, me preguntaron que si mayé, y yo como dominicano al fin le dije que NO; pero fue tan clara la maya, que hice que todo el mundo me mirara como un extraterrestre.

Déjenme decirles que a los parditos que voy, ya sea de volley o basket, como son recreativos. Nunca hay árbitros. Todo el mundo que comete una falta, para el juego, levanta la mano y dice “yo hice esto o yo hice lo otro”.

Por mi parte le diré que aprendí de esa experiencia. Nunca he visto un juego parado por discusión de qué fue o no fue. Por eso es que nuestra materia prima esta deformada desde hace tiempo.

Yo estudié en la ciudad de Montreal, y no vi un estudiante hablando de un “chivo” o de fijarse...... y hay empezamos, por qué tengo que decir que no lo hice si lo hice?, o acaso no creen que no es parte del respeto? si!, es parte del respeto a los demás, porque en realidad por esas bases es que se empieza el sentido de la honestidad, porque aquí no hay una persona que esté en una fila esperando su turno y venga otro por más general que sea y va a pasar por encima, eso es respeto por los demás.

Hace unos días leí algo de mi compueblano y muy querido Dioris Féliz (Dioris Valla) que hablaba de la mentira. La mentira a otra persona es falta de respeto, quien te habla mentiras te falta el respeto, pero más lejos aún, la mentira es un hábito de las personas que lo acostumbran hacer en un momento donde ya lo hacen incondicionalmente...y aunque ustedes no lo crean estamos moldeados así en nuestra sociedad.

Desde hace dos años estoy jugando golf. Una persona sí tiene hábito de mentir, gana el juego, porque es uno de los jugadores que anota la puntuación, solo llevándose de la verdad del jugador.

Y ustedes sabendónde está la más terrible mentira?, cuando engañamos a nuestra novi@ o espos@. Déjenme decirles que después de estar compartiendo con personas de diferentes países, rasgos sociales, religiosos, etc. no somos tan perfectos como pensamos.

Les diré algo más, yo conozco personas que si usted le dice que tiene una esposa y tiene una novia o una amante, usted desde ese momento no es una persona fiable, no es creíble. Hay personas que no se lanzan a hacer ningún trato con usted, usted saben porque razón? porque dicen que si usted es capaz de engañar y mentirle a la mujer con quien usted duerme, que le podrá ofrecer a otro.

Hasta hace pocos años descubrí que la infidelidad solo trae consigo FRACASO... en los aspectos emocionales, espirituales y económicos. Si quieren ejemplos, miremos a nuestro alrededor, todos los fracasos de dinero están asociados a queridas o muchas mujeres, y lo peor es que el ser humano en ese afán de vida se destruye sin apenas notarlo.

EN CONCLUSION, cuál es la enseñanza?, ¡que la materia prima en que estamos forjando el país esta deformada!, estamos queriendo sacar papa de donde sembramos yuca, tenemos que comenzar forjando hombres del mañana con valores sanos y correctos; no quiere decir una dictadura, ni remotamente parecido, es otra cosa, es diferenciar lo correcto de lo incorrecto, independientemente de a quien le afecte o no. Tenemos que empezar a beneficiar la colectividad pésele a quien le pese, o de lo contrario vamos directo al fracaso. Tenemos una sociedad con esperanza, porque mientras estén niños en nuestras calles tenemos una sociedad con esperanza de cambiar el mundo, pero no nos podemos permitir levantarlo sin ensenarle lo que es bueno y lo que es malo, lo que es correcto y lo que no es. Lo que es el respeto y no que no.

Espero que estas palabras no lleven a reflexionar hacia donde estamos encaminando nuestro futuro... gracias, hasta la próxima.

PD: A titulo de comentario les diré que en Canadá, un político descubierto con una infidelidad o una doble vida, tiene automáticamente su carrera política terminada.

"La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés." Antonio Machado