Mario Alcántara Ramírez (Mario El Toti o Mario el Sucio)
Después del asueto electoral los chukunautas hemos concentrado la atención en las vivencias históricas por diferentes personajes que solo, por sus celebres nombres y acciones, causaban en nuestro pueblo jocosidad, risa y cierta notoriedad, aunque para muchos de la sociedad Cabraleña elitista no lo sea para sí, solo depende de que lado lo observemos.
Siendo yo una persona que le ha gustado convivir y compartir con personas de todos los extractos sociales de mi pueblo, también me toco vivir una experiencia que quiero compartir con ustedes, dicha experiencia vivida fue con el querido amigo Mario Alcántara Ramírez, el cual por sus actos de poco aseo corporal le apodan Mario El Sucio.
Al arribo del gobierno del PRD al poder en el año 2000, a mi querido amigo Toti, como también en ocasiones escuche llamarle, le reconocieron su integridad de larga data al partido del Jacho prendido otorgándole un nombramiento de los pocos íntegros a la franquicia que consiguieron trabajo en ese periodo, para desempeñar labores propias de la oficina agrícola, trabajo al cual asistía y defendía como el primer día de jornada.
Uno de esos días luego de terminada su jornada laborar yo observo un acto en mi querido Toti que me dejo estupefacto.
En símbolo de que termino su jornada del día se retira del área de trabajo y se traslada al canal Ubero el cual se encontraba ubicado a 10 segundo de su lugar de trabajo e introduce sus polvorientas extremidades inferiores en las aguas de dicho recipiente de agua corriente y enjuaga varias veces y sale limpiecito de sus piernas, situación que cambia rápidamente a solo un metro de distancia, ya que el amigo por costumbre asumida siempre anda descalzo.
Al ver el nuevo estilo descuidado de sus pies, lo observo y le sugiero de manera amistosa:“Toti, es tiempo de que te pongas unos Zapatos”.
Yo le hago esa sugerencia en el entendido de que andaba descalzo producto de su escasa economía, ya estaba trabajando y produciendo efectivo, por lo que, aunque sea una "Samurai" podia comprarse y ponerse en los pies...... lo que no me esperaba era la respuesta de Mario la cual para mi cayó como la gracia que por poco me mata de la risa.... su respuesta, genial por cierto, fue la siguiente: “Ahora es que me lo pongo menos: ¡YO ESTOY EN MI GOBIERNO!
"Siempre digo la verdad, incluso cuando hablo mentiras"
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