¿Cómo eran los días de San Juan en Cabral?
“La vida no es lo que uno vivió, sino lo que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla”. Gabriel García Márquez
No es porque está lloviendo que pongo el titulo de este post así, lo hago porque la gente de Rincón de Ají (antiguo nombre del Municipio de Cabral) no concibe el día de San Juan sin asociarlo a agua, rios, lagunas y carreras de caballos decorados en su cabeza con hermosos arreglos de florales de Framboyán.
¡Ofrézcome!, en verdad que era un hermoso e ilógico recorrido por los hermosos balnearios de Cabral, para venir a terminar en el gran clásico de los baños: La Puente.
Recuerdo hacer, año tras año, ese insólito recorrido con amigos de infancia como el difunto Toni y los hoy vivos aún (y espero que por muchísimos años mas) Danielito, Opi, Alfonsito, Andry entro otros muchachos de Batey Paja.
No se como será hoy en Cabral, pero en mis tiempos de riqueza (estoy como Lachapelle, el “loco” de la UASD , RICO PORQUE NO NECESITABA NADA) nos levantábamos tempranos y entre 7am hasta las 6pm caminábamos con la única preocupación de darnos “un tirón” en cada balneario de Cabral haciendo perpetuar parte nuestra tradición cabraleña de “bañarse” en cada charco de agua existente en el pueblo.. ¡Y mira que en Cabral hay agua en “pete”!
Nuestro recorrido empezaba por el Canal del Majagual, La Isabela , Caga Pato, Maja-Yuyo, El de Bolivar, Fikimbo y asi íbamos recorriendo barrio por barrio, río por río, eso incluía el Yaque, La Laguna , La Furnia hasta terminar en la majestuosa Puente, la cual era “atomá” por unos muchachos de La Peñuela desde la noche de cada 23 de junio en víspera de que la misma se “eplorara de gente”.
La tiradera de “jú”, los inolvidables tirones desde lo alto del borde de La Puente agarrándonos de sogas y “bujucos”, los “embabunamiento” (bohucos y embadurnamientos, para decirlo correctamente) de lodo blanco, cenizas, carbón y otras cosas más para al final caer en esa sucia agua blanca del caliche, de la mugre de la muchachada y de las ganas de decir ¡Me bañé en La Puente !
Nadia se atrevía a pasar por La Puente , salvo que fuera a bañarse, pues siempre había un equipo “preparao” para “jondiarle” agua a todo el que pasaba o a todo inoportuno espectador que de manera “insolente” se atreviera a “retar” a esa masa de muchachos acuaticos que ese día solo respiraban agua y comían mangos.
De mi parte tengo vivos recuerdos especiales del esos días, pero el último que recuerdo es algo que nunca olvidaré..... y fue cuando un dia de San Juan me fue propinada una “tunda” de ganchos, “opercuts” y jabs que me dio Papito el de Papilín en un osada afrenta que le hice para que se pusiera “lo guante” conmigo debajo de la mata de mango……. La verdad, después de eso, no me he querido poner los guantes con nadie, pues recuerdo muy bien que Elvis (el de los Boyona) fue quien me lo puso, pero producto de la lección de boxeo que me dio Papito, nunca supe ni me di cuenta de quien ni cuando me los quitó…. Solo recuerdo ver visto, además de las clásicas “nimitas”, a Elvis vaciar una lata grandota de aceite El Manicero llena de agua en mi cara y oír a un paquete de muchachos voceando “¡Papito lo matate, Papito lo matate!”.
No sé como será hoy, pero cuando tuve el tiempo lo disfruté de a mucho y espero que (aunque hayan cambiado cosas, el tiempo lo cambia todo) los que tengan a oportunidad de pasar el día en La Puente no hayan olvidado mojar a todo el que pase, claro está, a ritmo de nuestro eterno grito de guerra:¡¡Agua, agua, agua, agua!!
"Siempre digo la verdad, incluso cuando hablo mentiras"
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