En honor a su día natal, quien en este día estaría
cumpliendo 79 años.
Los hermanos Luis y David Olivero
En una ocasión un amigo de la familia fue a visitar a Papá Comprado y en el transcurso de la conversación le hizo saber que su hermano David no se encontraba bien de salud.
Hasta esa fecha David aun residía en Cabral por lo que al día siguiente, muy temprano en la mañana, Papa fue a visitarlo para enterarse de la situación real de salud que enfrentaba su hermano.
Al ver la situación delicada, producto de una afección que le provocaba un sangrado a su único descendiente de Padre y Madre, contrató un vehículo y lo traslado hasta la ciudad Capital en busca de mejorar la salud de su pariente.
La clínica Rodríguez Santos fue el escenario para tratar la salud del paciente, la cual cada día se complicaba.
Ante tan emergente situación el doctor que le atendía llamo a solas a Papa para explicarle la gravedad de salud del hermano, a quien amaba tanto, el cual recomendó la intervención quirúrgica, a lo que estaban de acuerdo en aceptar si era la solución al problema.
La mayoría de los Cabraleños saben que Papa es un hombre de profunda fe basada en las creencias de los Testigos de Jehová, quienes aplican el principio bíblico de Hechos 15:29: de abstenerse de todo tipo de sangre, por lo que la reacción no se hizo esperar al enterarse de que la operación seria realizada mediante transfusión de sangre.
Papa inicio su defensa ante el galeno exponiéndole su fe así como su conocimiento medico y replicó con las siguientes palabras: los Testigos de Jehová hacemos lo posible por buscar atención médica de calidad. Cuando uno de nosotros o alguien de nuestra familia se enferma o tiene que ser operado, consultamos a médicos y cirujanos con experiencia en el uso de técnicas sin sangre, también estamos muy agradecidos por los adelantos que se han hecho en este campo. Cualquiera puede optar por tratamientos que no conlleven los riesgos relacionados con las transfusiones, como enfermedades transmitidas por la sangre, reacciones del sistema inmunológico y errores humanos. De todos modos, nadie puede asegurar que un paciente morirá si no recibe sangre ni tampoco que sobrevivirá si decide recibirla.
Con forma de hombre valiente continuo frente al doctor: soy un hombre de fe y estoy plenamente convencido de que mi hermano, con la ayuda de ustedes, se sanara.
Finalmente recitando el texto de Hebreos 11:1: Fe es la expectativa segura de las cosas que se esperan, la demostración evidente de realidades aunque no se contemplen, término su defensa ante el médico.
El galeno cabizbajo y sin nada que alegar se traslado hasta la habitación del paciente a quien le pregunto: señor Olivero ¿Prefiere usted morir por la razón de que su hermano se opone a la realización de la operación con transfusión de sangre?
David plenamente confiado en la decisión valerosa que había asumido su hermano contesto: Doctor yo acepto lo que mi hermano diga, hagan lo que él recomiende porque fue él quien me interno en este Centro Médico.
Los médicos no tuvieron otra opción que respetar y aceptar la posición tanto del paciente como la de su hermano y acudir a las sugerencias médicas y aplicar algunas inyecciones recomendadas que pararon el sangrado y la operación no fue necesaria.
Gracias a la posición valerosa de Papa, Tío David fue dado de alta con su problema de salud resuelto.
Décadas después son otras complicaciones de salud las que provocan la desaparición física de Tío.
“La verdad no es un artículo que se compra y se vende con beneficios” Juan Bosch
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