Cosas ajenas y nada plausibles han producido dicho alejamiento y desgano. Otras cosas han logrado ensimismarme y por demás adentrarme en una pasión que había dado por muerta y olvidada: Mis libros.
Debo admitir públicamente que tenia aproximadamente 3 años que no leía un paquito, pues todo era Gobierno de la Mañana y artículos periodísticos de intereses para mí.
Producto de lo expuesto, me he encontrado con un libro maravilloso, que compre hace 5 años y al cual no le había puesto un dedo, salvo para guardarlo. Ese libro es VIVIR PARA CONTARLA, del increíble Gabriel García Márquez.
Como siempre, junto a cualquier cosa que leo, tengo dos grandes e inseparables amigos: un resaltador amarillo y un diccionario que me permite cultivar nuevas palabras y recordar algunas ya olvidadas.
Producto de la lectura y lo anteriormente medio-expuesto había yo dejado de escribir; le dejé esto a Eliezer, Elmer y Melchor quienes se han adueñado de los chukunautas, y sin saberlo, han llenado la falta de escritura mía…. Lo cual agradezco de manera infinita.
En el libro, leí algo que me impactó bastante y me ha hecho entender algo que quiero compartir muy especialmente con Geuris, Elmer y Eliezer: “Si usted cree que puede vivir sin escribir, no escriba”.
Esta frase que aparece en “Vivir para contarla” en el párrafo 1 página 123, me dio un reventón mental que me ha hecho levantarme en el día de hoy (Junio 23) a las 4:43am a escribir esto que ya me tenia con insomnio….. y en ella me he dado cuenta que yo no puedo vivir sin escribir, aunque solo publique el 30% de las cosas que escribo.
Con esto, apelo a los antes mencionados a que pongan su “PLUMA” a favor de las ideas y desarrollo de nuestra sociedad, ya que poseen un talento increíble y una fina vocación de escritura, solo que quizás no se han dado cuenta que no pueden vivir sin escribir…. Ojalá y sea así, pues tanto Elmer como Eliezer poseen un impresionante y profundo talento para los cuentos cómicos, Vitico, Geuris y Melchor para los artículos profundos que nos hacen pensar en los retos de la sociedad en que vivimos.
Escribir no es fácil, lo digo y lo repito, pero siempre es interesante plasmar nuestras ideas y algunas de nuestras conversaciones en papel, para que estas sirvan de cuando en vez, aunque sean para reír.
"Siempre digo la verdad, incluso cuando hablo mentiras"
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