El escritor e investigador histórico Milton Olivo, con relación al “Día de la Raza” expresó “de que ya es hora de erradicar las mentiras de la historia oficial, con que se pretende esconder la verdad, y con la que tienen saturado a nuestros niños en las escuela, y es hora de que nos re-encontremos con nuestra verdadera historia, con la verdad”.
La peor de las mentiras es aquella que plantea de que la raza nativa, los Tainos, desaparecieron, afirmó. “Aquí en la isla de Quisqueya, hay descendiente de tres grupos humanos; los descendiente de los negros y de los europeos, que son los grupos minoritarios. Y los Tainos, que son los Indios Oscuros y los Indios Claros, que es el grupo mayoritario”. Por eso, Cristóbal Colon afirma en su diario de su primer viaje; “los nativos son de color pardos, unos. Y de color marrón, otros"
Desvirtuar la historia de los pueblos conquistados ha sido una constante de los pueblos conquistadores. Por eso, no podemos permitir que la historia de los vencedores se convierta en la historia oficial de los vencidos. Derrota que tenemos que asumir y superar en el futuro.
Afirmó Milton Olivo, autor del libro sobre el pueblo Taino “El Secreto Taino”, que no podemos seguir viviendo de espalda a nuestra verdadera historia. Deshonrando a nuestros ancestros. Ignorando la verdadera historia del pueblo autóctono de estas tierras. Que si bien fuimos derrotados y despojados, no fuimos exterminados.
Afirmó que dá vergüenza que nos encontremos con un gran monumento en honor a los verdugos; Cristóbal Colon y a Nicolás de Ovando, asesinos de los nuestros, y por parte aparezca un monumento a la Cacique Anacaona, Canoabo o Enriquillo ó Huarocuya. Es como si en nuestra casa tuviéramos retratos para honrar a los asesinos de nuestros padres, y los retratos de nuestros padres- brillaran por su ausencia.
Declaró que en 1493, Cristóbal Colon estableció una fortaleza en Janico, al Norte del país, con 62 soldados, luego reforzada con 400, por el rumor de que serian atacado por Caonabo. Dejando al mando de esta, a Pedro Mosen de Margarite.
Margarite ante la dificultades existente por la falta de alimento, viajó a la Isabela donde Cristóbal Colon, y terminó abandonando la isla secuestrando junto con el Padre Boyle y otros descontentos tres naves en que había llegado Bartomé Colon. Provocando que los hombres que estaban bajo su mando, al quedarse sin comandante se dispersaran en la zona en pequeños grupos, y comenzaran a convivir y multiplicarse con las Tainas de la zona, y de ahí el origen de la fuerte presencia de piel blanca entre los moradores del Cibao, contrario a las otras regiones de la isla.
No podemos seguir enseñando en la escuela la historia patria a nuestros niños, como si esta se iniciase con la llegada de los Europeos, cuando los Tainos tenían más de 5 mil años habitando esta isla, declaró.
Afirmó que existe la memoria celular, que es la info-energía que incluye la información física, mental, emocional y espiritual que proviene de toda la experiencia de vida, herencia genética y generaciones pasadas. Dijo que “nada de lo que experimentamos, escapa de quedar impreso y grabado dentro del holograma celular, en la forma de memoria. Lo que comúnmente llamamos "memoria celular" es el campo energético celular colectivo, generado por estas memorias celulares individuales”.
Declaró que el pueblo Taino adoraba al Dios YOCAHU, que significaba en lengua Taina “el origen del SER”. Y que los cronistas españoles en burla transmitieron que significaba el Dios de la Yuca. Que nuestros ancestros Tainos entendían que si eras un hombre bueno – Ser Taino- cuando moría tu alma volvía a YOCAHU, que era el origen del SER. Y que si eras malo tu alma al morir –tu alma- era arrebatada por MABUYA, ó el demonio.
Y Que sus mandamientos tenia cuatro puntos; No robar, no mentir, No ser vago y respetar a los mayores. Que la única ceremonia sangrienta era matar los ladrones, tradición que vive aún. Igualmente que las fiestas de palo, que eran las orquestas Tainas, y los Areitos los cantos.
Lo que refleja, que espiritualmente nuestro pueblo era superior al pueblo que lo conquistó, y del cual nosotros descendemos. Ancestros a los que debemos honrar y recordar, por ser los nuestros, insistió Milton Olivo.
De seguro que la crisis de valores que hoy sufrimos como pueblo, tiene que ver con el intento de borrarle a nuestro pueblo su verdadera historia. Por eso, dijo; “Hoy mas que nunca hay que repetir con nuestro himno: “Ningún pueblo ser libre merece, si es esclavo, indolente o servir. Concluyó.
Fuente: Vigilante Informativo.com
"Siempre digo la verdad, incluso cuando hablo mentiras"
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