Con una fábrica de bombón, una señora del municipio de Cabral ha logrado grandes riquezas.
Con solo 50 centavos que le regaló un compadre a quien ella había aconsejado a que jugara el número 70 en la lotería, que resultó ser el premio ganador, fue el capital que doña Milagros Encarnación recibió en el año de 1961 para iniciar una fábrica de bombón en Cabral que le ha permitido vivir dignamente toda la vida.
Doña Milagros, nacida el 17 de septiembre del año de 1938, inició su fábrica usando un anafe y un caldero para hornear su producto el que se vendía en las calles como pan caliente.
Refiere que cuando estalló la guerra de abril del 1965, ella se encontraba dando los últimos toques a lo que sería su primer horno hecho de tierra, lo que le permitió aumentar la producción y hacer más fácil el horneado del producto.
Dijo que cuando recibió los cincuenta centavos, dijo a su compadre que con ellos haría un gran capital y así ha sido, ha vivido a lo largo de los años sin la necesidad de que gobierno alguno le haya tenido que regalar nada.
Fabricando sus bombones a adquirido varias casas y propiedades y hasta en la ciudad capital ha podido comprar algunas casas. Es una mujer acaudalada y no por las posesiones materiales; es rica porque con esa fábrica ha podido educar a sus 6 hijos los que hoy son profesionales.
Y dice sentirse más feliz del mundo porque aparte de haber educado a sus hijos, constantemente aporta para la educación de otros que tienen el interés y carecen de los recursos.
“Con gran placer, periódicamente aporto libros y mascotas a estudiantes de escasos recursos que se acercan a mi porque desde siempre ha sido mi mística, que a todo el que quiera estudiar hay que ayudarlo.” Dice con mucho orgullo Doña Milagros
“Cada vez que hago aporte a la educación me siento la más feliz del mundo, la más acaudalada, porque desde muy temprano aprendí que la mayor riqueza de un ser humano es ser un profesional.”
Hoy su fabrica ha evolucionado, el horno que ahora usa es de gas, GLP, y tiene varios empleados que la ayudan en la preparación de la materia prima para fabricar sus bombones.
Dice tener grandes satisfacciones en la vida que son haber podido educar a sus hijos, que sus bombones se vendan en gran parte del país y poder ayudar a cualquier joven a terminar sus estudios. “ESAS HAN SIDO MIS SATISFACIONES.”
"Siempre digo la verdad, incluso cuando hablo mentiras"
0 cometarios:
Publicar un comentario